lunes, 5 de marzo de 2012

Maribel Velarde sobre novio: "Dijo ‘voy a demostrar que te amo’ y se disparó"

La vedette relató a la policía que antes de matarse, Jaime Rojas Canevaro la amenazó poniéndole una pistola en la boca y que la agredió Maribel Velarde afirma que, segundos antes de matarse, Jaime Rojas Canevaro, quien fue encontrado muerto el pasado miércoles en su departamento, le dijo que le probaría que la quería. “Comenzó a gritarme e insultarme diciendo que yo era una cualquiera. (…) De pronto me dijo, ‘te voy a demostrar que te amo’. Entonces tomó su pistola y se disparó en la cabeza. Después lo vi en el suelo y no sabía qué hacer”, relató Velarde a la policía. Asimismo, la bailarina contó que, un día antes de morir, Rojas Canevaro la agredió brutalmente. “Me comenzó a agredir, tomándome de los cabellos, me tiró contra el suelo, me dolía el rostro, mis brazos, yo gritaba de dolor y pedía auxilio, pero me tapaba la boca, nadie me escuchaba. Luego me levantó del suelo y como estaba por desmayarme me llevó a la habitación, me sentó en la cama y me apuntó colocándome en la boca la pistola, luego me dijo que no me iba a matar, que lo iba hacer él”, declaró a la policía. Según la bailarina, la discusión entre ella y quien fuera su pareja comenzó luego de que Rojas Canevaro recibiera una serie de mensajes al celular en los que lo llamaban “cachudo”. Tras la muerte de Rojas Canevaro, la bailarina afirma haber llamado a uno de sus amigos; Christian Marcial Marcial, quien a su vez se habría comunicado con Aldo Castagnola Bejarano. Ambos ingresaron al departamento antes de que llegara la policía. Cabe señalar que la prueba de absorción atómica que se le practicó a Velarde resultó negativa, mientras que los exámenes que se le hicieron a la víctima sí resultaron positivos, por lo que la hipótesis del suicidio viene cobrando más fuerza. Por otro lado, la desaparición de los teléfonos celulares de la víctima y de la bailarina habrían alertado a la policía. Según Velarde Ylasaca, cuando discutió con el fallecido, este le quitó su teléfono y lo destruyó. Sin embargo, no se hallaron restos de los celulares.